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Imperial, de CVNE, fue el primer vino español elegido el mejor vino del mundo

Nombre: Compañía Vinícola del Norte de España S.A, CVNE
Ubicación: Laguardia
Sector: Vínícola
Número de empleados: 150
Año de fundación: 1879

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Los hermanos Eusebio y Raimundo Real de Asúa fundaron en 1879, en Haro, la sociedad ‘Corcuera, Real de Asúa y Compañía’, que poco después pasó a llamarse ‘Compañía Vinícola del Norte de España’, CVNE como la conocemos en la actualidad. Hoy en día, sigue controlada por la 5ª generación de descendientes directos y está compuesta por cuatro bodegas: CVNE, Imperial, Viña Real y Viñedos del Contino.

Entre las diferentes denominaciones que producen y comercializan pueden presumir de contar con la marca más antigua de España, Monopole, que acaba de cumplir 100 años. El buque insignia de la bodega, imperial, comercializado desde 1915 fue el primer vino español elegido como el mejor de entre los 100 mejores del mundo por la revista Wine Spectator en 2013, primera vez en la historia para un vino español.  Imperial fue seleccionado anteriormente en una cata a ciegas para servirse como vino oficial en la boda de los actuales reyes Don Felipe y Doña Letizia.

La bodega Viña Real, en Laguardia, es la sede central de la empresa. Obra del arquitecto francés Philippe Mazières, fue inaugurada en 2004 por el rey Juan Carlos I. Recibe casi 10.000 visitas al año, contribuyendo de manera notable a la promoción enoturística de la zona, y fue la primera bodega de España adaptada íntegramente para invidentes y discapacitados visuales.

Su filosofía empresarial aúna innovación y tradición. Desde el respeto al legado familiar están pendientes de las últimas tecnologías, investigando e invirtiendo en que la calidad evolucione con el paso del tiempo. Sin olvidar la globalización. Hoy en día exportan cerca de un 30% de los 8 millones de botellas que salen de sus barricas y están presentes en 75 países de todo el mundo, con especial incidencia en Países nórdicos, Reino Unido, Méjico, EE.UU. o Asia, donde acaban de abrir una oficina en Shangai. En sólo cinco años han duplicado sus datos de internacionalización.

El desarrollo tecnológico ha sido clave en este proceso. CVNE invierte en las últimas tecnologías en materia de vinificación y en su bodega de Viña Real, por ejemplo, cuenta con una grúa central de 60 metros de diámetro, única en el sector, que permite levantar depósitos de acero inoxidable con 6.000 kilos de uva. Gracias a su sistema de gravedad, patentado por ellos mismos, se transporta la fruta hasta los depósitos y se deja caer con todo su peso para arrancar la primera fermentación. De esta manera se evita tocar la uva, no se chafa el hollejo y se obtiene la máxima calidad. Otras bodegas han imitado después esta manera de vinificar.